sábado, 22 de marzo de 2008

¿PARA QUE ENSEÑAR?

El valor del ¿para que enseñar?

El ¿para qué enseñamos? o ¿para qué vamos a enseñar? es una pregunta que más de una vez me ha rondado por la cabeza y creo que al igual que a mí, a muchos de mis compañeros que estudian pedagogía, es que en realidad es una pregunta todo menos sencilla y por lo tanto difícil de responder. Es claro que no quiero enseñar, una vez que me encuentre trabajando en un establecimiento educativo, solo lo que me indica el programa, según el nivel en el que este, elaborado de acuerdo al marco curricular de enseñanza media. Soy conciente, no solo por la formación que he recibido como futura profesional sino como persona, que no todo se debe enseñar de forma mecánica como lo indica un manual, eso no ayuda a desarrollar las capacidades de comprensión de los alumnos además de que es casi imposible cumplir con esta norma, porque se quiera o no el profesor es un modelo en muchos aspectos para los jóvenes. Ellos ven en el profesor, muchas veces, un modelo a seguir, imitan en ocasiones su lenguaje, toman ideas que este explica y las funden con las propias creando un conocimiento mixto. Lo ven como un guía, alguien con quien pueden conversar de sus planes futuros, opciones, expectativas y esperan palabras de aliento. Es por ello que no solo se enseña aquello para lo que hemos estudiado sino mucho mas, e incluso hay actitudes que inconcientemente estamos enseñando en un aula de clase, un ejemplo de esto es la correcta forma de saludar, pronunciar ciertas palabras, sentarse etc.
Retomando mi idea principal de no solo enseñar aquello que se nos indica, está claro que eso no ocurre en las aulas escolares porque el programa así lo permite y esta única oportunidad no debe ser desaprovechada por ningún profesor y hago incapie en esto por el hecho de que en muchas ocasiones se subestima el interés del alumno por lo que se le enseña. Tengo muy claro que no a todos los jóvenes que asisten a una clase de Historia y Geografía les agrada la materia de América precolombina, por poner un ejemplo, pero este poco interés también se debe a que el docente con el paso del tiempo ha perdido la capacidad de impresionar a sus alumnos, por lo cual siempre y lo reitero, siempre se debe innovar en las técnicas con las cuales se enseña. Los profesores son el sol en el universo del aula y los jóvenes planetas que necesitan luz para seguir su camino, es por esto que tomo la idea de, más que profesor, mentor o guía como aquellos que existían en la antigüedad e instruían y educaban a aquellos jóvenes pertenecientes a la nobleza preparándolos para lidiar con el poder de mandar sobre otros. Este guía somos nosotros en la actualidad y nuestra misión es convertir generaciones de muchachos interesados o no, porque como ya lo he declarado esta en nuestro poder el interesar al alumno en la materia que se le imparte, en personas capases de ver las distintas realidades presentes en nuestro país y el mundo, que puedan en base a esto construir una propia a partir del dominio y control de las habilidades que poseen. Ese es el ¿para qué enseñamos? para mostrarles las herramientas con las que cuentan y las cuales pueden utilizar en su formación como futuros adultos.
No quiero dejar fuera de discusión las diferencias que existen entre un colegio y otro y de cómo estas diferencias transforman el ¿para qué enseñamos? de los profesores, porque en la realidad es así, muchos docentes enseñan con un fin distinto de acuerdo al establecimiento educacional en el que se encuentran. En lo personal no estoy en desacuerdo con este precepto siempre y cuando la finalidad sea ayudar al alumno a descubrir su propio potencial, sus verdaderas capacidades intelectuales, cognitivas y como emplearlas de la manera más productiva para sí, porque es claro que no nos vamos a encontrar con las mismas realidades en un colegio de clase alta y uno de menores recursos. Lo trascendental es no enseñar por enseñar o denigrar a aquellos jóvenes con menores capacidades, no todos son iguales claro esta pero el peor error es apartar a quienes les cuesta más, el enseñar a no desvalorar a las personas sirve para modificar o crear valores humanos también. Nosotros los futuros docentes, tan mal calificados, estigmatizados y vistos por esta sociedad chilena, debemos ser concientes de que no solo educamos con el propósito de preparar jóvenes para que ocupen un puesto en una empresa, obreros o tengan un negocio propio, como dicen los economistas, meros entes económicos que cumplan un rol en esta economía global para el desarrollo del país, sino que educamos para formar personas.

1 comentario:

Profesora dijo...

Estimado alumno tu calificación es:
Claridad de expresión debes revisar tu ortografía y algunas puntuaciones. El ensayo es pertinente al tema asignado y está expresado de manera coherente, pero para futuras publicaciones trata de enfocarlo aun más al tema que se está tratando.
Argumentación es válida por que un ensayo está escrito desde la perspectiva del que escribe, sin embargo, trata que tus opiniones estén contrargumentadas o complementadas con otros autores para enriquecer el discurso.
Logra persuadir al lector logras llegar al lector, sin embargo, debes acercar tus comentarios aun más a la realidad y como enfrentarás tu problemas que se te puedan presentar cuando hagas clases.
Calidad de la reflexión tus reflexiones están acorde al tema, sin embargo, cuando hables de innovar, debes dar solución a los problemas, piensa que tú serás un ente fundamental en el proceso, por lo tanto, debes ir asimilando las cosas. También debes considerar algo muy importante que es la cantidad de horas y alumnos con los que te toparás, lo que va a complejizar tu trabajo, comienza a hacer tuya esa realidad.
Compromiso con la audiencia debes tratar de involucrar a los lectores con tu trabajo dejando preguntas abiertas para que ellos te respondan.
Tu calificacion es un 71